4
En el
concesionario, un enorme tráiler descargaba los coches —
mientras Harry
Kaulitz, un alto directivo de Aston Martin, indicaba a los
trabajadores
el lugar donde colocar los caros y elegantes vehículos.
Aquel día
habían llevado varios de alta gama y los clientes más
adinerados,
avisados por él, habían ido a echarles un vistazo. Mientras los
hombres
observaban embobados los coches, Harry se deshacía en atenciones
con sus mujeres.
Al igual
que su hermano Tom, se las llevaba de calle y raro era que
una fémina
no se fijara en él. Pero a diferencia de Tom, tenía los ojos verdes y el
cabello
castaño y una cara inocente que nada tenía que ver con lo que era
en
realidad.
Gracias a
su magnetismo, con apenas veintisiete años era un alto
ejecutivo
de la marca Aston Martin y un hombre que viajaba por el mundo.
Cuando la
puerta del concesionario se abrió y entró Tom, para Harry ya no
existió
nadie más. Adoraba a su hermano y éste lo adoraba a él.
Con una
divertida sonrisa, Harry caminó hacia él y lo abrazó, ante la
atenta
mirada de varias mujeres, que suspiraron al verlos. Eran dos jóvenes
guapos y
triunfadores y su fama de gentlemen los acompañaba. Tras darse
un
caluroso abrazo, el menor de los hermanos Kaulitz, dijo:
—Ven,
vamos a ver tu coche.
Sin
demora, caminaron hasta un lateral del concesionario y cuando
llegaron
ante el impresionante coche, Tom silbó y Harry dijo:
—Aquí lo
tienes, hermanito. Aston Martin Vanquish Coupé. Máxima
velocidad
295. Aceleración de 0 a 100 en 4,1 segundos. Motor doce
cilindros
en V. Culata de aluminio. Inyección. Tracción trasera.
Automático.
seis velocidades.
—Mío
—afirmó Tom, tocándolo con deleite.
Desde que
vio aquel coche en una revista, hacía más de un año, supo
que debía
ser suyo y por fin estaba ante él.
Tom
sonrió. Le encantaba el gesto de placer de su hermano y,
abriendo
una de las dos puertas del vehículo, lo animó:
—Venga,
vamos a dar una vuelta.
Tom
asintió. Se montó junto a su hermano y sacó el coche del
concesionario.
Con sumo cuidado, condujo por las calles de Múnich.
Aquella
máquina era impresionante y cuando salieron a la autopista,
simplemente
voló.
Una hora
después, cuando regresaron al concesionario, Tom lo tenía
aún más
claro. Aquel impresionante coche debía ser suyo, y ante las risas
de su
hermano, afirmó:
—Lo quiero
mañana.
—¡¿Mañana?!
—Sí.
Mañana.
—Tom,
tengo que arreglar papeles y...
Él miró a
Harry con exigencia y, cortándolo, dijo:
—Mañana te
dejo mi viejo Aston para llevarme éste. Y ahora mismo
vamos a
comenzar a mover los papeles para que yo lo pueda disfrutar. Por
el seguro
no te preocupes, llamo a Corina y ella me pasa el del otro Aston a
éste. ¿Con
quién más hay que hablar?
Harry
sonrió y, mirándolo, respondió:
—Acompáñame.
Tendremos que hacer varias llamadas, pero lo
solucionaremos.
Si algo tenían
claro los hermanos Kaulitz era que siempre se salían
con la
suya.
Esa tarde,
______ paseaba con su hija por una concurrida calle de
Múnich.
Hacía frío. En enero siempre hacía un frío siberiano en aquella
ciudad.
En
compañía de su pequeña, se paró ante cientos de puestos para
comprarle
mil regalos y la cría aplaudió emocionada. Eso hizo reír a _______.
Su hija
era su felicidad. Su mejor regalo. Cuando entró en una cafetería
para tomar
algo, le sonó el móvil. Al ver que era un número especial,
contestó:
—Teniente
Parker al habla.
—Buenas,
teniente.
_______
sonrió. Era su buen amigo Fraser y, sentándose en una silla,
preguntó:
—¿Por qué
me llamas desde ese número?
—Porque
sabía que lo cogerías.
Torciendo
el gesto, ella protestó y murmuró:
—Sabes que
fuera de la base soy _______, nada de teniente Parker.
—Lo sé...,
lo sé...
Ambos
rieron y, finalmente, _____ preguntó:
—¿Qué tal
todo con la azafata de Air Europa?
—Bien...
muy bien. ¿Ya se ha ido tu madre?
—Sí.
Anoche la llevé al aeropuerto y ya está en Asturias con la
familia.
—Perfecto.
Un extraño
silencio se hizo entre ellos y _______ inquirió:
—¿Qué
ocurre, Fraser?
Tras
maldecir en un americano muy de Kansas, él dijo:
—¿En serio
tu hermana va a regresar a Fort Worth?
______
resopló y contestó:
—Eso
parece. Sabes que se fue a España por una temporada tras la
separación
de mis padres, pero tarde o temprano Scarlett tiene que rehacer
su vida.
—Tienes
razón. —E intentando pensar en otra cosa, le espetó—:
¿Dónde
estás?
—Comprando
regalos para Sami. Me encanta malcriarla. ¿Y tú?
—Con
Monica en su casa.
—¡Guau,
eso suena bien!
Fraser
sonrió e, intentando olvidarse de la hermana de ella, añadió:
—Sólo te
diré que desde ayer no hemos salido de la cama.
—¿Lo
pasaste bien entonces?
—Y lo voy
a seguir pasando. Sólo te he llamado por si necesitas algo,
pero en
cuanto cuelgue, regreso a la cama con Monica. Estoy muy
necesitado.
Ambos
rieron y ______ murmuró:
—Regrese a
la cama, sargento, olvídese de otras mujeres y disfrute de
su
necesidad.
Una vez
colgó, miró a su pequeña de ojos negros y dijo:
—El tío
Fraser te manda besos, Sami. ¿Quieres merendar?
La cría
aplaudió y unos señores que había a su lado sonrieron.
Samantha
era una preciosidad de niña, además de simpática, y allá
donde
fuera siempre llamaba la atención con su coronita de princesa. Le
gustaba la
gente y lo demostraba sonriendo y acercándose a todo el mundo.
A
diferencia de su madre, era rubia, pero las dos tenían un rasgo común:
sus ojos
negros.
_______
disfrutó de las gracias de su hija y los comentarios de quienes la
rodeaban
mientras dibujaba en una servilleta.
Aquella
tranquilidad, en aquel lugar, le encantaba. Nada tenía que ver
con la
intranquilidad que vivía cuando estaba de misión.
Mientras
observaba cómo una señora bromeaba con su pequeña,
sonrió.
Pero su sonrisa desapareció cuando recordó las palabras de su
madre al
referirse a que Samantha la añoraría cuando creciera. Sabía que
tenía
razón. Pero aquél era su trabajo.
Tras pedir
un café y unos sándwiches, madre e hija merendaron.
Horas más
tarde, cuando regresó a su casa, Dora, la mujer que se
quedaba
con Sami cuando ella estaba fuera, pasó para ver cómo estaba la
niña. Tras
charlar con ella durante un rato, _______ preguntó:
—Dora, ¿podrías
quedarte con Sami unas tres o cuatro horas esta
noche?
La mujer
dijo:
—¿Tienes
una cita?
Ella
asintió. Tras la conversación con Fraser, supo que necesitaba salir
esa noche
y, mirándola, respondió:
—Sí. Tengo
una cita.
5
______ decidió ir a
Sensations, un local en el que sólo había estado un
par de veces, pero donde
lo había pasado muy bien.
Desde que Mike murió,
ella no había quería rehacer su vida, pero
decidió seguir jugando a
los juegos que practicaba desde antes de
conocerlo a él. Aunque
esta vez en solitario. Sabía lo que quería y sabía lo
que buscaba, y allí lo
iba a encontrar.
Sin miedo a nada, la
joven traspasó la puerta del local, fue hasta
guardarropía y allí dejó
su largo abrigo.
Los hombres que pasaban
por su lado la miraban. Alta, sexy, morena y
con unas proporciones más
que aceptables gracias a toda la gimnasia que
hacía por su trabajo.
Ataviada con un bonito y
corto vestido negro de cuero, un pañuelo de
seda en el cuello y
subida en unos impresionantes zapatos de tacón, pasó
con decisión a la segunda
sala y fue directa a la barra. Allí pidió un Bacardí
con Coca-Cola y, antes de
que el camarero le pusiera la bebida, ya tenía a
dos hombres a su
alrededor.
_____ los miró, uno de
ellos le pareció interesante y al otro
directamente lo descartó.
Centrándose en el rubio de ojos claros que le
había gustado, preguntó:
—¿Cómo te llamas?
—Carl, ¿y tú?
—_______.
Cuando el camarero dejó
ante ella su bebida, ______ dio un trago y el
llamado Carl inquirió:
—¿Estás sola?
Ella no respondió y él
insistió:
—¿Qué busca una chica
como tú en un local como éste?
______ sonrió y respondió
con sinceridad:
—Lo mismo que tú.
Él se acercó un poco más
a ella. ______ no se movió y preguntó:
—¿Quieres tocarme?
—Sí.
—Tócame entonces.
La mano de él comenzó a
subir por sus muslos. Al sentir el roce, a
_______ se le puso el
vello de punta y, sin cortarse, dijo:
—Busco dos hombres. Ya he
encontrado uno. Ahora llegará el otro.
Carl sonrió. No entendía
a qué se refería, pero no le importó. Era una
guapa y sensual mujer y
supo que lo iba a pasar bien. Durante un rato
charlaron de sexo. Hablar
de eso en aquel tipo de locales era lo más normal
del mundo y cuando todo
estuvo claro, Carl propuso:
—Vayamos a la pista de
baile.
—No. Mejor al cuarto
oscuro.
—Perfecto —asintió el
hombre.
_______ dio otro trago a
su bebida, bajó del taburete y comenzó a andar
hacia donde sabía que
estaba esa sala. Al entrar, oyó música cañera.
Durante varios minutos,
las manos de Carl volaron por su cuerpo,
mientras ella cerraba los
ojos y se dejaba hacer. Le gustaba imaginar que
Mike observaba y que
pronto sus manos fuertes se unirían al hombre que
ella había elegido. Y así
fue. Segundos después, sintió otro par de manos a
su espalda que la
tocaban. Mike.
Excitada por el momento y
a oscuras, no podía ver la cara de ninguno
de los dos y eso le gustó.
Las manos de ellos volaban por su cintura, sus
pechos, su trasero y
cuando ya no pudo más, dijo, volviéndose hacia el
hombre cuyo rostro no había
visto.
—No hables y no permitas
que te vea la cara si quieres que te permita
jugar conmigo.
Él asintió y ella con
decisión añadió:
—Pasemos a un reservado.
Ellos la siguieron. ______
no miró la cara del segundo hombre en ningún
momento, ni él se dejó
ver. Ella no quería. Sólo quería pensar que era
Mike. Necesitaba
fantasear con él aunque en ocasiones lo odiara. Cuando
entraron en el reservado,
______ puso música y la voz de Bon Jovi llenó la
estancia. El desconocido,
tras ella invitarlo, le bajó la cremallera del
vestido de cuero y cuando
éste cayó al suelo, _______ salió de él.
Carl se desnudó y, acercándose,
preguntó:
—¿Puedo tumbarte en la
cama?
—No. —Y agarrándolo con
decisión, ordenó, mirándolo a los ojos—:
Ponte de rodillas ante la
cama y espera a que yo vaya.
Carl no dudó. Estaba
claro que a aquella mujer nadie le decía qué
tenía que hacer. Una vez
estuvo arrodillado ante la cama, con una jarrita de
agua y un paño limpio, la
observó y vio que, sin mirar al tipo que estaba
tras ella, decía:
—Quítame las bragas y tócame
como si fuera tuya. No preguntes.
Sólo haz lo que quieras
sin preguntar.
Al sentir que él hacía lo
que ella le había pedido, ______ cerró con fuerza
los ojos y tarareó Have
a nice day, de Bon Jovi. Esa música la transportaba
a tiempos pasados, en los
que Mike y ella jugaban con otros y lo pasaban
bien.
El desconocido hizo lo
que ella pedía y, tras quitarle las bragas y
dejarlas sobre una silla,
le metió un dedo en la vagina con seguridad; ella
jadeó. Durante varios
minutos, aquel hombre prosiguió su juego, mientras
_______ se dejaba
masturbar por él.
—Voy a sentarme en la
cama —anunció de pronto deteniéndolo—.
Quítame el pañuelo que
llevo en el cuello y átamelo sobre los ojos. No
quiero verte, pero quiero
que sigas jugando conmigo, ¿entendido?
Sin decir nada más, la
joven caminó hacia la cama. Se sentó ante Carl
y, al levantar la vista,
vio que el desconocido había desaparecido, hasta que
lo sintió tras ella. Notó
cómo le desanudaba el pañuelo de seda negro del
cuello y se lo ataba
alrededor de la cabeza, tapándole los ojos.
Excitada, se tumbó en la
cama y se abrió de piernas ante Carl. Se
expuso totalmente a él,
que supo lo que tenía que hacer. La lavó. Una vez
la secó, se puso las
piernas de ella en los hombros y, sin demora, la devoró.
Acercó su boca a la
deliciosa y depilada vagina que le ofrecía gustosa y,
con ansia, la deleitó.
Los jadeos de _______
llenaban el espacio. Aquello era maravilloso.
¡Sexo! Como decía Fraser,
era necesario y se decidió a disfrutarlo a tope.
Carl, encantado con
aquella entrega, le puso las piernas sobre la cama
y la hizo abrir los
muslos. Ella obedeció. Ante él quedó más expuesto aún
el centro de su placer.
Aquel pubis depilado en forma de corazón era
maravilloso y tentador, y
con los dedos le abrió los labios para tener mejor
acceso. Chupaba... Succionaba...
Y cuando su lengua, tras
un rato de juego, se enredó en su clítoris,
_______ se arqueó. Agarrándola
por la cintura, él la encajó más en su boca y
ella se estremeció hasta
que se dejó ir. Enloquecida por el placer que había
sentido, se incorporó y
exigió, tomando las riendas del momento:
—Túmbate en la cama.
Quiero follarte.
Carl, levantándose del
suelo, volvió a acceder a lo que ella pedía. Una
vez se tumbó en la cama,
se puso un preservativo y, rápidamente, _______ se
sentó a horcajadas sobre él
y se empaló. Excitada, movió las caderas en
busca de placer. Lo
necesitaba.
Durante varios minutos,
sus jadeos, acompañados de los de Carl,
sonaron en el reservado,
hasta que el desconocido, que había permanecido
en un segundo plano, se
subió a la cama y, tras ponerse un preservativo,
hizo lo que ella había
pedido y participó sin preguntar.
Carl, al ver las
intenciones del otro hombre, la tumbó sobre él. _______
sintió que le untaban gel
en el ano y, para dilatárselo, le metieron un dedo,
dos, hasta que instantes
después chilló de gusto al sentirse penetrada.
Hombres no le faltaban
nunca. Por suerte, su genética la dejaba elegir
y ellos nunca se negaban.
Pero en ese instante, en ese momento, sentirse
llena y deseada era
espectacular.
—Mike... sigue... sigue —suplicó.
El desconocido supo que
lo de Mike iba por él y, agarrándole los
pechos desde atrás, la
empaló una y otra vez con golpes secos, mientras
Carl la penetraba por la
vagina sin parar.
Esa noche, sobre las
once, Tom llegó al Sensations acompañado por
una guapa pelirroja. Maya
era exquisita y, como él, sólo demandaba sexo
caliente. Tomaron algo en
la barra y allí rápidamente contactaron con otra
pareja.
Después de una primera
copa llegaron otras más y antes de entrar en
uno de los reservados, Tom
fue al servicio. Al pasar por delante de una de
las salas privadas, la música
cañera que salía de allí llamó su atención.
Levantó la cortina y
observó a dos hombres y una mujer en una cama.
—Besos no... —susurró
ella.
Esa negación, que había
escuchado siempre de su amiga Judith, le
llamó la atención y se
paró a observar. Con deleite, observó la curvatura de
la espalda de ella y sus
ojos se fijaron en un tatuaje que llevaba. No lo veía
claro por la luz tenue,
pero parecía un atrapasueños. Llevado por la
curiosidad y la música
entró en el reservado y, sin hacer ruido, se acercó y
pudo ver con claridad el
tatuaje. Efectivamente, era un atrapasueños.
Sin decir nada, observó
el juego de aquellos tres. Era el tipo de sexo
que lo enloquecía. Dos
hombres y una mujer disfrutando sin inhibiciones.
Ella se le antojó
deliciosa y apetecible. Sus gemidos como poco eran
delirantes y su entrega
maravillosa. No supo cuánto tiempo estuvo
observándola, hasta que
recordó a la guapa pelirroja que lo había
acompañado y decidió
salir de allí, ir al baño y regresar donde la había
dejado.
Veinte minutos después,
mientras Tom y su pelirroja hablaban
sentados a la barra del
bar, el cortinaje del reservado se abrió. Vio salir a
una muchacha de pelo
corto y morena, pero no le vio la cara. Rápidamente
la identificó como la
mujer del reservado.
Nunca la había visto por
allí y eso llamó su atención, mientras
recorría con su ambarina
mirada aquel cuerpo y admiraba lo bien que le
quedaba el vestido de
cuero negro. Sin moverse de su asiento, Tom la
observó y cuando ella
desapareció del local, la pelirroja, deseosa de sexo,
le propuso al oído:
—¿Pasamos a un reservado?
Tom, olvidándose de la
morena, sonrió y murmuró:
—Por supuesto, preciosa.
No veo el momento de desnudarte.
Cuando ______ llegó a su
casa, de madrugada, Dora sonrió al verla y
preguntó:
—¿Qué tal tu cita?
Ella, quitándose los
altos tacones, sonrió y respondió:
—Bien. Muy bien.
Cuando Dora se marchó a
su casa, _______ fue a ver a su hija. Estaba
dormida. Acto seguido se
desnudó y se metió en la ducha, donde las gotas
de agua se confundían con
sus lágrimas al pensar como siempre en Mike.
¿Por qué no lo podía
olvidar?
HOLA!!! COMO SE PUDIERON DAR CUENTA, TOM YA CONOCIO A LA _______ PERO NO LE VIO LA CARA NI SABE QUIEN ES :)) Y LA DESEO :D ... BUENO YA SABEN 4 O MAS Y AGREGO SINO NO ... ADIOS
:O guaooo que intensooo jajaja, hayyyy ya yo quiero que Tom y (Tn) se vean y tengan un sexo intenso también pero el mas intenso de todos jeje!!! espero los próximos caps virgi y que emoción que Tom ya vio a 8Tn) :):)
ResponderEliminarSube los próximos caps virgii me dejastes muy intrigada pleaseeee!!! Quiero un sexo bien intenso entre Tom y (Tn)..
ResponderEliminarWoo woo
ResponderEliminarPense que era tom ajajajaja
Sube pronto :)
Esta muy interesanteeee, sigueeee
ResponderEliminarAwwwww ya se conocieron!!! *.*
ResponderEliminarAl fin.. (tn) es una loquilla sexosaaa.. Hahahahaha
Virgi disculpapor no comentar pero mi trabajo no me dejaba. Llegaba cansada a dormir.
Siguelaaa subeee.. Hace dias q no subes :)